INTRODUCCIÓN
Preparar el CAM, escoger el material, revisar el stock, y …¿Cómo lo fijo?¿Con qué estrategia aprovecho más el material?¿No tardaré más en prepararlo que en mecanizarlo?¿Me sale a cuenta?…
Éstas son algunas de las preguntas que rondan la cabeza de un fresador antes de comenzar a fabricar la pieza…Y es que la decisión no es trivial, de hecho, es posible que sea la que más pueda influir en el resultado final. Ya puedes tener una multitud de buenas herramientas a tu alcance, que si el material de stock no se fija bien, o supone mucho tiempo de preparación, el coste de producción se dispara considerablemente; más si se trata de la producción de prototipos y series cortas.
La fabricación de series cortas y prototipos mediante fabricación sustractiva es una herramienta fundamental en muchos de los proyectos de TAIMU, tanto para nuestros clientes como para el desarrollo interno de proyectos o maquinaria.
Teniendo en cuenta la necesidad y el contexto actual de la industria, donde la personalización y la eficiencia son clave, hemos decidido fabricar nuestras propias garras modulares.
Estas garras suponen un recurso más a tener en cuenta para poder mecanizar distintos tipos y tamaños de brutos.
¿QUÉ SON LAS GARRAS MODULARES?
Las mordazas modulares son una manera de estacar muy versátil. Pueden servir para mecanizar placas no finas ( > 10 mm ), bloques grandes o piezas con garras blandas. Trabajan bien con bruto rectificado y sin rectificar. Su gran ventaja respecto a la mordaza convencional es su modularidad, que permite trabajar con brutos de todos los tamaños.
MODO DE EMPLEO
Este método consiste en anclar las piezas mecánicamente mediante 4 tornillos.
La mordaza está pensada para que un módulo quede completamente fijo y el otro módulo se desplace por las ranuras de la mesa de la fresa de manera que quede en el otro extremo del bruto. Cuando está en posición, se fija primero la base de manera que la parte móvil del módulo que hemos movido, esté un su posición más lejana al bruto.
De esta manera, cuando procedemos a fijar la parte móvil, ésta ejerce una fuerza en horizontal y hacia abajo que ancla la pieza. Además, gracias a la geometría de los insertos («talon grip»), que es un labio afilado, estos penetran en la pieza, obteniendo más agarre aún.
Este tipo de «setup» proporciona una unión realmente fuerte entre el bruto y la fresa, permitiendo operaciones muy agresivas.
Su perfil bajo, permite aprovechar muy bien la altura disponible de la fresa, pudiendo trabajar sin problemas con piezas altas o herramientas largas.
Supone un método muy rápido de preparar y permite un cambio de material con agilidad y precisión en caso de producción de series.
CONCLUSIÓN
Al desarrollar nuestras propias garras modulares, tenemos la capacidad de diseñar y fabricar productos que se adapten perfectamente a las necesidades específicas de nuestros clientes. Así, mostramos nuestro compromiso a proporcionar soluciones personalizadas que maximicen la productividad y la eficiencia.
Al tener el control total sobre el diseño y la fabricación de las garras modulares, podemos garantizar la calidad y la durabilidad de nuestros productos.
Otro aspecto importante de desarrollar nuestras propias garras modulares es la capacidad de innovar y adaptarnos rápidamente a las cambiantes necesidades del mercado, ya que el equipo de BCNC está en constante búsqueda de mejoras y nuevas características que puedan agregar valor a nuestros productos.
En resumen, hemos decidido fabricar nuestras propias garras modulares para ofrecer soluciones personalizadas, garantizar la calidad y la durabilidad de nuestros productos, y mantenernos a la vanguardia de la innovación en la industria del fresado.